jueves, 26 de noviembre de 2015

Comentamos "Nada se opone a la noche", de Delphine de Vigan






Después de encontrar a su madre muerta en misteriosas circunstancias, Delphine de Vigan se convierte en una sagaz detective dispuesta a reconstruir la vida de la desaparecida. Los cientos de fotografías tomadas durante años, la crónica del abuelo de Delphine, registrada en cintas de casete, las vacaciones de la familia filmadas en súper ocho o las conversaciones mantenidas por la escritora con sus hermanos son los materiales de los que se nutre la memoria. Nos hallamos ante una espléndida y sobrecogedora crónica familiar, pero también ante una reflexión sobre la «verdad» de la escritura, porque son muchas las versiones de una misma historia y narrar implica elegir una de esas versiones y una manera de contarla. Y esta elección a veces es dolorosa, porque en el viaje de la cronista al pasado de su familia irán aflorando los secretos más oscuros. (Anagrama).



Una novela muy dura y difícil de leer, desgarradora, sincera, valiente, maravillosa. A todos nos gustó mucho, nos enganchó la historia de Lucile y de su familia, de sus hijas, especialmente de Delphine, la autora del libro. Una lectura que deja huella y que nunca olvidaremos.

La Kriticona tiene una hermosa reseña sobre él, podéis leerla en este enlace.

Lo recomendaríamos sin dudarlo, aunque hay que advertir que es una novela muy dura y que no se debe leer en momentos bajos, pues cuando lo terminas te deja sumido en una profunda tristeza.