domingo, 28 de febrero de 2016

Comentamos "El bolso de Mary Poppins", de Julia Conejo






Este ha sido el primer libro de poesía que hemos leído y me atrevería a decir que también ha sido una de las tertulias más amenas, enriquecedoras y entrañables de los cuatro años que llevamos compartiendo lecturas. Por supuesto, esto no habría sido posible sin la presencia de Julia, autora del libro, que leyó y comentó con nosotros sus poemas.

Julia Conejo Alonso reside desde siempre en León y es profesora de Lengua Castellana y Literatura en un Instituto de Secundaria de la ciudad. Lleva escribiendo mucho tiempo pero su carrera literaria como poeta comienza en el año 2010. En 2011 obtiene el Premio Joaquín Benito de Lucas que convoca el ayuntamiento de Talavera de la Reina con su poemario Muñecas Recortables, y en el 2012 consigue de nuevo un prestigioso premio, el Alfonso el Magnánimo de Valencia, por Peces transparentes. ¿Para qué sirve el frío? es publicado al año siguiente sin haber obtenido ningún premio, lo que indica que su carrera como poeta se consolida. El bolso de Mary Poppins es su último libro de poemas, con el que ha sido galardonada con el XXXII Premio Carmen Conde de Poesía escrita por mujeres.

Con voz pausada y lenta, acariciando sus palabras, Julia comienza leyéndonos el primer poema del libro:

MUJERES DESCALZAS

Me asustaban las filas
de mujeres descalzas
con abrigos de paño
y una vela encendida entre las manos.

No entendía por qué,
pero cuando pasaban por delante
me encerraba la cara
en algún recoveco del cuerpo de mi madre.
Sentía que la boca
se llenaba de barro
y que las cucarachas abrían galerías
partiendo de las plantas de mis pies.

No era un temor infantil
que se acallase
con palabras amables
ni con chicles de fresa. 

La semana pasada,
cuando llegó la hora de la cena en el geriátrico
y yo me despedía de un pariente lejano,
el pasillo se llenó de mujeres calzadas,
que no llevaban velas,
y formaban una hilera
de sueños desahuciados.

Y si hubiera tenido
a mi lado a mi madre,
me hubiera refugiado
al fondo de su abrigo. 

Porque hay temores
que siempre van descalzos
delante de nosotros,
aunque pasen los años.


Yo recuerdo, al igual que Julia, las filas de mujeres descalzas, con velas en las manos... el silencio sepulcral de las procesiones... A mí me asustaban más los hombres tapados, los que iban de negro, especialmente, y rehuían tu mano cuando se la tendías. También muchos de nosotros nos acurrucábamos bajo el abrigo de nuestros padres igual que ahora lo hacen nuestros hijos. ¡Inocente miedo! Quién pudiera volver a sentirte. Y cuando la vida pasa y se convierte en filas de mujeres calzadas, ¿dónde se refugian ellas?, ¿dónde nos refugiaremos nosotros?

Como indica el título, El bolso de Mary Poppins es un libro lleno de sorpresas, breves retazos de historias, propias y ajenas, que esperan a ser leídas para cobrar una nueva vida en cada uno de nosotros. Del bolso sale un variado abanico de personajes femeninos, reales, imaginarios o legendarios que nos transportan al mundo del cine, de la literatura o de la vecina de al lado.

Una lectura muy recomendable, de esos libros que regalaríamos sin pensarlo.

Nuestro compañero Alfredo elaboró una hermosa poesía que recoge un verso de cada uno de los veintinueve poemas del libro de Julia:




 GRACIAS Julia.